Son la 5 de la mañana, buena hora para partir. He mal dormido dando incontables vueltas esta noche. Pensando lo que me espera, el cambio profundo en mi vida que está a punto de ocurrir, involuntario, provocado e ineludible. Últimamente he vendido todo lo que poseo, desde el coche a los cacharros de cocina y la moto, lo peor fue la moto, pensar que no volvería a sentir el viento al trazar la carretera, ¡joder!, … se me hizo un nudo en la garganta, un nudo que me acompañó hasta la misma puerta de la casa de Morfeo dejando un amargo regusto a sueño raro que por la mañana todavía perdura……